Un trabajo académico debe tener la siguiente estructura:
- Portada: debe contener el título (comprensible, claro, preciso y representativo del trabajo), nombre del autor o autora y grupo, nombre del profesor o profesora y fecha de entrega.
- Índice: debe contener todas las partes del trabajo. Se puede hacer un primer índice provisional que se irá modificando a medida que el trabajo avanza. El índice final irá paginado.
- Introducción: en ella se expondrán los objetivos, especificando el ámbito, el alcance y los límites de la investigación. Se realizará una breve descripción de los capítulos, con la metodología empleada, y se expondrá la principal conclusión alcanzada. Pueden añadirse los agradecimientos.
- Desarrollo del tema: organizado en capítulos o apartados.
- Conclusiones: se expondrán con una redacción clara. Se pueden resaltar resultados positivos, negativos, cuestiones pendientes, etc.
- Referencias consultadas: siempre se deben poner todas las fuentes que se han consultado. Esto dará fe de tu honradez y sensibilidad intelectual, además de reforzar los argumentos expuestos y así evitarás plagiar las ideas de otros autores.
Para más información, consulta en el bloque 4 (Citar la información) el apartado Cómo evitar el plagio: las citas bibliográficas.